Hoy vamos a hablar un poquito de la Ergonomía
En estos días de pandemia donde toda nuestra normalidad ha cambiado y hemos pasado de estar en una oficina por más de 8 horas al día a estar en la comodidad de nuestro hogar realizando teletrabajo (work from Home) pero te has puesto a pensar si realmente estamos haciendo un trabajo adecuado en cuanto a la ergonomía en el hogar?
La Ergonomía se define como un cuerpo de conocimientos acerca de las habilidades humanas, sus limitaciones y características que son relevantes para el diseño de los puestos de trabajo, por lo que estudia las posturas más apropiadas, para disminuir los riesgos de salud ocupacional (según estudios más recientes no existe una postura adecuada).
La ergonomía es una forma de diseñar estaciones de trabajo, prácticas laborales y flujo de trabajo para adaptarse a las capacidades de los trabajadores. El diseño ergonómico reduce los factores de riesgo que se sabe que contribuyen a las lesiones y enfermedades ergonómicas ocupacionales, como esguinces y torceduras y trastornos de trauma acumulativo (CTD).
Si el trabajo se realiza en posturas incómodas o con un esfuerzo excesivo, puede producirse fatiga e incomodidad. En estas condiciones, los músculos, tendones, ligamentos, nervios y vasos sanguíneos pueden resultar dañados. Las lesiones de este tipo se conocen como trastornos musculoesqueléticos (TME).
El propósito de la ergonomía en el sitio de trabajo es crear una mejor combinación entre el trabajador, el trabajo o tarea que se ejecuta y los equipos que utilizamos, Una combinación acertada aumentaría nuestra productividad.
Es importante recordar que se deben observar todas las tareas asociadas con cada trabajo, porque cada una podría tener un factor de riesgo y reducir posibles lesiones.
Cada vez un mayor número de empresas intentan incorporar principios ergonómicos en sus puestos de trabajo como norma de seguridad ocupacional; no es una moda, es una necesidad creciente y que debido a su efectividad, ha demostrado que todas las personas deberían aplicar estas normas básicas en las actividades de la vida diaria.
Los fundamentos ergonómicos deben ser siempre vistos como una búsqueda de las posiciones más naturales del cuerpo en el desempeño de las tareas que se realizan. En el ámbito laboral de los oficinistas, se parte del hecho de que esta población
mantiene largos periodos en una misma posición, y que generalmente mantiene un alto nivel de estrés, el sedentarismo también se hace presente en un porcentaje importante de éstos trabajadores como parte de su estilo de vida debido a la poca movilidad en el puesto de trabajo. Si a todo esto agregamos escenarios en los cuales se compromete la salud músculo-esquelética de los trabajadores, será realmente difícil obtener la productividad que buscan las empresas.
Por estas razones se brindan a continuación algunas pautas ergonómicas de elementos básicos para aplicar en el puesto de trabajo (normalmente es un cubículo para muchos oficinistas o bien un espacio adaptado en el hogar); lo siguiente no reemplaza una valoración integral realizada por un profesional en salud especializado en el área, pero sin duda puede optimizar ciertas condiciones de espacio y uso de herramientas por parte del trabajador.
SILLA: el respaldo de la silla debe respetar las curvaturas naturales de la
columna vertebral, además de proveer adecuado soporte lumbar; la altura de la misma debe permitir que los pies se posicionan “planos” (apoyo total) en el suelo. Se puede facilitar el uso de un apoyo para pies (taburete) para que la posición sea la más confortable en el caso de las personas de baja estatura.
Los apoyos para los brazos deben ser suaves, permitiendo a los hombros estar en una posición relajada y cercana al tronco.
Las sillas de rodines permiten una mejor movilidad por el puesto de trabajo y no deben comprimir la parte posterior de las rodillas.
ESCRITORIO: debe permitir ubicar el monitor a al menos 50cm de la cabeza del usuario, además del espacio requerido para colocar el teclado y el mouse (normalmente se utilizan “bandejas” de rieles bajo el escritorio para este fin). El escritorio debe facilitar una amplia variedad de posturas durante la jornada laboral, por lo que el orden de los accesorios y documentos debe ser prioridad. Es muy importante tratar de evitar la colocación de la unidad de cómputo bajo el escritorio, para no reducir el espacio de movilidad de los pies.
MONITOR: debe ubicarse siempre frente al usuario, a 50-100 cm de distancia
(entre la cabeza y el monitor), manteniendo un ángulo confortable de 15-20º
aproximadamente. En caso de necesitar transcribir o leer textos impresos, deberían ser colocados a un lado (lo más cercano posible) al monitor.
MOUSE Y TECLADO: ambos deben colocarse frente al usuario, a una altura tal que permita una flexión de codos cercana a los 90º, manteniéndolos cercanos al cuerpo y con los hombros relajados. Las muñecas deben estar rectas y alineadas con el antebrazo, preferiblemente apoyadas en una almohadilla de gel al utilizar el mouse para evitar compresiones que comprometen el tejido blando. Es importante evitar excesivamente el uso del “muñequeo”, por lo que se pueden usar las funciones de atajo del teclado (Ctrl, Alt, Shift, por ejemplo)
ACCESORIOS: el objetivo principal debe ser facilitar las tareas del usuario sin que eso rompa las normas ergonómicas, reduzca el espacio y/o limite la libertad de movimiento. Son habituales las almohadillas de gel o los retenedores de documentos.
En la siguiente gráfica, se muestra como ejemplo la posición y condiciones más
favorables para el oficinista promedio. Para información más detallada de cada uno de los elementos básicos del puesto de trabajo, es recomendable visitar el sitio web de la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional de los Estados Unidos (OSHA, por sus siglas en inglés); para mayor detalle ingrese a:
Estos son algunos consejos que puedes seguir y adaptar tu puesto de trabajo en casa o en la oficina.
En la próxima te brindaremos consejos de pausas activas como estiramientos para que realices en casa.
